jueves, 20 de marzo de 2014

A propósito de los Jóvenes y el Alcohol

Aquí os dejamos un vídeo del programa @Debate de Canal Sur en el que hemos tenido ocasión de colaborar. Para más información sobre el tema:

11 comentarios:

Conso Gallego dijo...

El documental es un reflejo real de lo que encontramos los fines de semana, en eventos especiales, celebraciones,etc.
El consumo de alcohol está presente en la mayoría de eventos sociales, personales, familiares y culturales, tanto que se normaliza incluso su exceso. Actualmente lo "raro" es no beber, y lo "normal" es encontrar a menores y mayores de edad con comas etílicos, personas que desfasan debido al alcohol, accidentes de tráfico, etc.
Desde mi opinión las leyes no prohíben el consumo lo que quieren es controlarlo, y por eso crean espacios para ello como los botellodromos. Como educadores este tipo de medidas no van con nuestra filosofía ya que el control no funciona ni es compatible con la educación social, y considero que tendrían que replantearse el porqué la gente sigue consumiendo y sigue adelantándose la edad de consumo.

Las medidas como el botellodromo tal como dice Salvador Borrego lo que hace es normalizar el consumo, y que muy lejos de un beneficio es un perjuicio para los que consumen alcohol, ya que el fin es reunirse únicamente para beber. Es muy común encontrarte con jóvenes que verbalicen literalmente que si no pueden beber prefieren no salir, que si no beben no pueden bailar o ni siquiera acercarse a un chico/a, en fín, no es una barbaridad lo que estoy diciendo, tan solo tienes que salir un fin de semana para oir y ver este tipo de cosas.
Ante este panorama no es suficiente con tomar medidas políticas, hay que intervenir con la gente, trabajar directamente con aquellos para concienciar y replantearnos qué pautas estamos fomentando.

Paloma Romero Ruiz dijo...

Me ha parecido muy interesante el vídeo puesto que es lo que se puede ver actualmente los fines de semana o cualquier día de fiesta, evento especial...
El consumo de alcohol cada vez empieza a edades más tempranas y eso es algo de los que todos/as los/as ciudadanos/as debemos de preocuparnos y tomar conciencia de ello. Tomar conciencia de que un consumo moderado no cause o provoque daños irreversibles, pero que si se consume de forma habitual y en grandes cantidades, origina graves daños en el organismo de la persona, y no solo eso, si no que puede desencadenar en accidentes de tráfico, peleas... que a veces acaban con la vida de los consumidores e incluso de personas inocentes que se encuentran estas situaciones por sorpresa, bien por pasar por ese lugar, bien por ir conduciendo cuando alguien borracho/a colisione con su coche.
La mayoría de las personas que beben lo justifican con que "si no bebo no me lo paso bien"; "hay que beber para que no de vergüenza bailar o poder ligar con más facilidad" o cosas así. Yo por ejemplo no bebo y me lo paso igual o incluso mejor que aquellas personas que si lo hacen, salir para mí conlleva reunirme con personas queridas con los que pasar un rato agradable y no beber y beber hasta no poder más.
Es cierto que en ocasiones nos encontramos localidades en las que no hay una zona donde la gente joven pueda reunirse para salir de noche, pero si los botellódromos se crean, lo que estamos haciendo es potenciar el consumo de alcohol entre los jóvenes. Es por ello que se deben de trabajar alternativas a este consumo desmesurado de alcohol con las que los jóvenes vean que pueden divertirse sin necesidad de sacrificar su salud de manera tan fortuita.

maria gonzalez dijo...

Da miedo ver el documental... creo que son pocos los jóvenes que hoy en día salen y no beben, y realmente da miedo las cifras que salen en el documental.
Yo pienso que el consumo de alcohol entre los jóvenes no se ve como una adicción o como un problema, pero si es cierto que se ha convertido en una costumbre, porque ya no nos juntamos para hablar o para reírnos sino que nos juntamos principalmente para hacer botellon.

Ana Caro Martínez dijo...

Desde que se aprobó la "ley antibotellón" no es la primera, ni será la última vez, que veo noticias sobre el efecto del alcohol en los jóvenes o sobre que cada vez consumen a una edad mas temprana. No creo que las medidas legales sean las más adecuadas. Esta visto y comprobado que las leyes prohibitorias no cesan la actividad prohibida. Así que algo estamos haciendo mal.

En primer lugar, como se refleja en el vídeo, nuestro país relaciona fiesta con alcohol y los hábitos de consumo de alcohol son elevados. España es uno de los países con mas bares por metro cuadrado, y en el ámbito familiar crecemos viendo a nuestras familias consumirlo con naturalidad, ¿no es normal que los adolescentes lo vean como algo necesario en la interacción social? sus padres se están relacionando con alcohol por medio cada vez que se socializan. La visión y los hábitos de los adolescentes son los esperados, son lo que hemos sembrado.

El problema para solucionarlo, es el económico, es decir, es más económico aprobar una ley que tomar medidas e invertir en proyectos para adolescentes de educación en salud, de hábitos de consumo saludables o incluso invertir en centros de ocio para que los adolescentes tengan una alternativa a la fiesta del fin de semana. Por eso el problema no es de fácil solución si no nos movilizamos, si no se invierte y si se sigue normalizando

helenistica3000 dijo...

El documental que he visto me parece de lo más acertado en cuanto al ocio que tienen en la actualidad los jóvenes. De acuerdo con lo que ha dicho mis compañeras, pienso que llevan razón ya que el alcohol está implícito en nuestra vida: celebramos todos los acontecimientos brindando,realizamos las comidas con alcohol...por lo que nos hace ver que consumir alcohol es normal,pues lo vemos diariamente. Pero centrándonos en la juventud y relacionado con el alcoholismo pienso que no tenemos alternativas de ocio, si preguntamos a ellos que quieren,que desean hacer en su tiempo libre, estos no saben a que respondernos pues la única respuesta es el botellón. Coger comas etílicos, ver cuanta cantidad de alcohol se echan, ver cuantos cubatas son capaces de beber en una hora, etc. Son la única diversión que ven.
Desde el campo de la educación social pienso que se debe educar el ocio y el tiempo libre, que sean conscientes de que alcohol y ocio no tienen porque ir de la mano, pues existen otras opciones más saludables,sociales y mejor que a lo que los jóvenes dedican en su tiempo.
Por último en cuanto al botellodromo, veo no es la respuesta más acertada para paliar lo que nos encontramos todos los fines de semana, la respuesta está en los elementos con los que nos socializamos e interaccionemos, es decir,en la educación. Desde muy pequeños debemos comprender y aceptar que es leer un libro o simplemente bailar sin necesidad de beber es lo normal de un sábado.

V.Jimenez dijo...

Yo considero que el botellón es un fenómeno social. Para mi el problema es que la sociedad lo acepta como una moda que pasará, y probablemente sea así pero… ¿Qué secuelas dejará?
Como madre cuando me entré que mi hijo fumaba tabaco, fui al kiosko donde mi hijo habitualmente compraba, y con el que tenemos confianza y le pedí que no le vendiera. Mi hijo entonces tenía 16 años, y el dependiente se excuso diciendo que desconocía que comprara tabaco mi hijo y no conseguí nada.
Las ofertas de ocio resultan más atrayentes si lleva implicado fiesta, alcohol, y música alta. Eso se traduce en dinero y ganancias. Aquellos que ofertan ocio saben que atrae más el alcohol que un paseo por la montaña pero si en los locales la música fuera mas baja y se pudiera dialogar con los amigos a precios bajos ¿tendría éxito?
Pero no hay que generalizar, hay muchos jóvenes que no son adictos al botellón, y si a los deportes y la naturaleza.
Las generaciones actuales de padres fuimos educados en los principios de la transición, Se pusieron de moda las discotecas, los pub y el tomar copas con los amigos, en la dictadura eso solo se le permitía a aquellos que tenían una cierta edad, que habían hecho la mili o que tenían pareja estable. Estos antecedentes hacen que no se vea mal que los jóvenes estén con sus amigos, en un lugar para ellos haciendo lo que todos hacen.
¿Pero lo que todos hacen es sano?
¿Y como se obtiene el dinero para pagar las bebidas? En la mayoría de los casos y sin mirar estadísticas estoy convencida que lo dan los padres.
Pienso que en los jóvenes que acostumbran a ir de botellona, a una edad muy temprana, se esta fomentando la ley del mínimo esfuerzo, no tienen control parental en horarios, tienen dinero el cual no les ha costado esfuerzos conseguir, y el consumo del alcohol sin control hace que inmediatamente consigan un estado de embriaguez que les hace perder el sentido y el concepto de lo real.
Soy madre, y como tal considero el la obligación que tanto padre y madre tiene de tomar las riendas de este problema social.
Si los padres/madres dejaran de ver normal la botellona, y entendieran que estar a las 5 de la mañana fuera de casa, aunque sea lo normal no es sano, que las cosas se consiguen tras un esfuerzo, (sin justificar que no haya trabajo por la situación laboral o que el fracaso escolar es culpa de los profesores) y que el alcohol no es tan inofensivo como parece, algo se podría hacer para erradicarla.
Pero para que los padres lo vean, principalmente los medios de comunicación, y las instituciones, gubernamentales como no gubernamentales tendrán que luchar dando información a éstos.
Creo que en la actualidad es esto lo que se está haciendo, de una forma acertada, el problema es que los resultados los veremos en las próximas generaciones y no porque se haya pasado la moda, sino porque se habrá luchado contra ella.

Unknown dijo...

Una vez visto este breve vídeo sobre el alcohol y los adolescentes, creo que es conveniente debatir sobre, según el vídeo, las raíces que tienen nuestras fiestas tradicionales en relación con el alcohol, pues en la inmensa mayoría de las fiestas las pasamos ingestando alcohol, cosa que es permanente en nuestra socialización y posteriormente tratamos de seguir estas tradiciones imitando a nuestro entorno, por lo tanto esto es difícil remediarlo. Así que como agentes del cambio social deberíamos educar en un consumo moderado y responsable.
Aunque esto no es suficiente, pues cuando los adolescentes sufren los efectos del alcohol comprueban que esto les divierte.
Aquí llegamos a la paradoja de ¿adicción o diversión?En mi opinión somos adictos a la diversión, a la cual añade el consumo de alcohol. Así que una buena forma de tratar este fenómeno social, como es el botellón, es concienciar en la separación de diversión y la ingesta de alcohol, tratando la diversión con otros aspectos que no favorezcan a este consumo que está presente en nuestros días.

FATIMA dijo...

Cuando escuchas estas noticias reales, niños de trece años de edad que ya empiezan a consumir alcohol y a emborracharse, comas etílicos, vómitos, etc. te quedas asombrada/o.
Yo con trece años coleccionaba pegatinas y salia a dar una vuelta por mi barrio con mis amigas. Es impresionante lo que cambia la sociedad y lo rápido que cambia, pero esto tiene una palabra que se la relaciona muy muy bien. "LA MODA" es la moda que hoy en día jóvenes de trece años de edad salgan de "botellón" y se emborrachen, si no, no son aceptados por su círculo de amigos.
En el vídeo hay una pregunta que me ha llamado mucho la atención: ¿Cómo se podría solucionar esta situación? Pienso que esta situación se debe empezar solucionando desde el colegio. Intentar hacer ver a los jóvenes que te puedes divertir sin beber alcohol porque el abuso de ello es dañino para tu cuerpo. Desde la eso o, incluso desde sexto de primaria impartiría una asignatura a los alumnos sobre salud y sobre el efecto ya no del alcohol, sino de las drogas en sí. Que haya conocimiento, que ellos sepan, que no tengan ningún tipo de dudas e intentar concienciarles que, en este caso, el consumo de alcohol en tan temprana edad no les beneficia para nada y que hay muchas formas distintas de pasarselo bien.

Lorena dijo...

En primer lugar, resaltar la calidad de este documental , el cual me ha parecido muy bueno pues en pocos minutos te deja las ideas clarisimas apoyándose en cifras y datos reales.
Personalmente pienso que es una pena, y que este problema no es nuevo, que hace muchos años que el alcohol es un problema generalizado, que tiene todas las consecuencias que se comentan en el vídeo, ¿Porque no se ha intentado solucionar antes? ¿Porque existen zonas para hacer botellón?, creo que es un problema, de tantos que hay, que no se quiere solucionar. Es alarmante la edad de inicio, muy alarmante, pero ahí también están entre otros factores la educación de esos menores, la venta de alcohol a menores, etc...
En el caso del consumo excesivo, eliminando el factor "edad", es mas difícil de controlar, pero por ejemplo, en una discoteca donde una persona solo consume dentro de esta y una copa vale de 5 a 8 euros..no te encontraras a nadie con coma etílico...ahora, las discotecas tienen la libertad de hacer días de barra libre ¿no es eso otro tipo de botellón?
Sinceramente, no se, sigo pensando que es un problema que no se quiere solucionar, las leyes que se cambian son mínimas, el control que se hace creo que podría ser mayor, y las medias tomadas tipo "multas" tampoco son ni donde, ni todas las que deberian.

Unknown dijo...

Este documental ejemplifica a mi parecer la situación actual de muchos jóvenes hoy día, incluso de menores. Sería utópico conseguir que se eliminara el fenómeno del botellón, puesto que muchos jóvenes lo consideran como algo normal sea el día que sea o la hora que sea.La cosa es beber. Por ello, también considero, que debido a las secuelas que puede ocasionar en un futuro, y todas las consecuencias negativas que trae consigo es idóneo que desde las instituciones se trabaje la prevención y el consumo excesivo de alcohol, siempre contando con el apoyo de la familia, puesto que como hemos podido ver en el vídeo en muchos casos es en casa donde se consume.
Es necesario que se haga un consumo responsable, y pienso que beber alguna copa algún fin de semana no es malo.Lo que habría que evitar es el hecho de beber todos los fines de semanas cantidades excesivas.

Unknown dijo...

Me parece muy interesante el documental y refleja lo que, en realidad, es el botellón. Aunque reconozco haber participado en ellos, no me gustaron ya que siempre los vi como un foco de problemas derivados de la falta de control por la terrible ingesta, no sólo de alcohol, sino también de otras sustancias, como dice nuestro profesor David. Además yo siempre he pensado que la raíz del problema está inmersa en los cimientos culturales de nuestra civilización occidental, en la que el alcohol, a diferencia de otras drogas, es algo que está bien visto.
Si a esto sumamos, los hábitos familiares muy relacionados con las bebidas alcohólicas, la permisividad de las familias, y la incitación hacia el consumo de alcohol desde los medios de comunicación y en verbenas, ferias, fiestas importantes como navidad o fin de años,...pues nos encontramos con un problema de envergadura social.
Respecto a este problema, los profesionales de la educación (pedagogos/a, educadoras/es, maestras/os,... tenemos un gran reto que cumplir y un enorme trabajo que realizar, ya que no será fácil solucionar esta problemática social.